El central Gonzalo Llerena ya es de Linares

Le recordarán los que estuvieron en el play-out, Gonzalo es aquel central espigado que se lo llevaba todo por arriba, que fue la pesadilla de la zaga del Linares en las acciones a balón parado, justo la especialidad del Cacereño por tener jugadores así.

Gonzalo marcó el tanto para los verdiblancos, fue el que se cruzó providencial delante de Rosales para cortar el pase de la muerta de Payán, el mismo que remató ese balón al travesaño y el que obligó a Lopito a meter un guante milagroso en la ida, lo que impidió que el Linares hoy esté en Tercera. Desde luego, el joven central pacense fue el mejor futbolista del Cacereño en aquella finalísima, donde estaba también en Tribuna Alta el ahora técnico, Miguel Rivera, que puso sus ojos en las cualidades técnicas y físicas de Gonzalo Llerena. Ahora que se ha puesto al frente del equipo, Lasarte y el técnico malagueño coincidieron que, tras el descenso del Cacereño, el fichaje de Gonzalo no se le podía escapar al Linares porque no es un central de Tercera.

Para el jugador, la llamada de los azulillos fue un alegría. «Yo en Cáceres estaba muy bien, pero ya necesitaba un cambio de aires porque llevaba muchos años en el club. Desde el principio, la negociación ha sido fácil porque he recibido mucha confianza de Alberto Lasarte y Miguel Rivera, desde el primer contacto».

Gonzalo jugó la pasada temporada 33 partidos, sólo en 2 de ellos no fue titular, en total 2.800 minutos y 2 goles. La campaña anterior había jugado 24 partidos con 2.500 minutos sumados, y en la 2013/2014 con 24 años ya jugó 32 partidos. Es un futbolista hecho, que salió del Zafra Juvenil para jugar en el Cacereño y como sub-23 ya disputó 25 partidos, 2.500 minutos. Ya apuntaba alto el que ahora es nuevo jugador minero.

«Pese a mi juventud, considero que estoy en el mejor momento de mi carrera deportiva, tengo experiencia y soy un jugador de mucho trabajo, eso no va a faltar. Vengo para luchar por el Linares», argumentaba Gonzalo, horas después de alcanzar un acuerdo con los mineros.

Pero a si algo hizo terminar de decantarse a Gonzalo por la propuesta minera fue «haber jugado en Linarejos y haber visto a esa afición, hace que haya pocas cosas que uno se tenga que pensar. Sé que voy a un gran club. Ojalá todos los domingos estuviese Linarejos como en el play-out, fue algo increíble. Sólo puedo decirle a los aficionados azulillos que lucharé a muerte por este club y por esta camiseta, haremos grandes cosas este año».